Antes llamada impotencia sexual. La disfunción eréctil se define como la dificultad del varón para alcanzar y mantener una erección que lleve al paciente a tener una relación sexual satisfactoria tanto para él como para su pareja.
Las alteraciones de la erección se presentan también con la edad, en cuando el varón va envejeciendo y como parte del deterioro orgánico que todos padecemos.
Se nota que la erección pierde firmeza, debe haber mayor estímulo para alcanzarla, se acorta el periodo de eyaculación y el orgasmo es menos intenso.
Hay varias causas sobreagregadas que se relacionan con este problema entre ellos está:
En los varones jóvenes se debe descartar trastornos de orden emocional y vascular, las causas debidas a padecimientos hormonales son responsables de menos del 1% de los casos.
El tratamiento de inicio es farmacológico se usan inhibidores de fosfodiesterasa.
Existiendo en el mercado 3 productos los cuales son efectivos hasta en un 80% de los casos.
Sin embargo tienen contraindicaciones por lo que NO se sugiere la automedicación.
Cuando el tratamiento farmacológico fracasa usamos medicamentos vasoactivos inyectados directamente en el cuerpo cavernoso del pene.
Y si esto tampoco funciona, son excelente opción las prótesis peneanas.