La palabra urología fue mencionada por primera vez en el año 1840 como una rama médica que estudiaba el sistema urinario, sin embargo no fue aceptada oficialmente hasta 1896, cuando se funda la Asociación Francesa de Urología, que después se expandió al resto del mundo.

Desde siempre el hombre ha sufrido por naturaleza o por sus hábitos medioambientales y sociales afecciones del sistema tractourinario, en los muros de algunas cuevas del sur de Francia se encontraron dibujos de hace 20,000 años que describen la técnica de la circuncisión. Entre los años 3400 al 1200 antes de Cristo se documenta la existencia de catéteres uretrales y en un texto de hace 3000 años hallado en la India, se mencionan tubos de plata, hierro y madera recubiertos con mantequilla líquida para lograr, a través de cateterismo uretral, la evacuación de orina en pacientes obstruidos.

En la actualidad la Urología es una ciencia médica compleja y de vanguardia que pone a disposición del paciente, técnicas confiables de avanzada que pueden resolver bajo determinadas circunstancias, todos los problemas relacionados con las estructuras del cuerpo que le corresponden.

Cómo ámbito anatómico de actuación, la urología contempla el riñón y sus estructuras adyacentes, las vías urinarias y el aparato genital masculino, atendiendo las disfunciones de los siguientes órganos y estructuras.

La urología puede abordar desde un punto de vista quirúrgico, médico e integral, todas las dolencias de su área de influencia nosológica (enfermedades, signos clínicos, síndromes y síntomas) y anatómica (órganos, sistemas y aparatos).